El presidente de la Confederación de la Producción y del Comercio (CPC), Ricardo Mewes, calificó como «extremadamente grave» el escándalo relacionado con posibles coimas a funcionarios del Servicio de Impuestos Internos (SII) y la Comisión para el Mercado Financiero (CMF). Estos presuntos actos ilícitos tendrían como objetivo obtener información privilegiada y beneficios para el empresario Daniel Sauer, controlador de «Factop» y la corredora de bolsas SFT.
Reacción de la CPC
En una declaración, Mewes expresó que este caso «da cuenta de una red de corrupción donde estarían involucradas varias personas e instituciones públicas de alta connotación». Condenó enérgicamente los hechos y manifestó la esperanza de que los organismos pertinentes investiguen con máxima celeridad para castigar con todo el rigor de la ley a los culpables.
El líder del gran empresariado destacó la preocupación de la CPC por la posible afectación de la institucionalidad democrática y la pérdida de confianza en el correcto funcionamiento de los mercados. Lamentó que la falta de probidad e irresponsabilidad de unos pocos perjudique a toda la sociedad, instando a actuar con urgencia y severidad.
Mewes enfatizó el compromiso de la CPC con la cultura de integridad, el actuar ético y los valores en las empresas chilenas. Rechazó de manera tajante el corrupto mecanismo revelado, considerándolo un atentado contra los principios y buenas prácticas en las relaciones entre personas, empresas e instituciones públicas.
Postura de Sofofa
Desde la Sociedad de Fomento Fabril (Sofofa), también se consideró este hecho como «de la mayor gravedad». En su declaración, expresaron que, de comprobarse los hechos, estamos frente a actos de corrupción inaceptables para el país y que condenan enérgicamente.
Sofofa subrayó que casos como este dañan la confianza de la sociedad en las instituciones y generan dudas sobre organizaciones que deben ser ejemplos de integridad, velando por el bien común. Esperan que el Ministerio Público y el Poder Judicial actúen con la máxima celeridad y apliquen el rigor de la ley, demostrando la intolerancia hacia la corrupción.
Asimismo, instaron a las instituciones a reforzar sus mecanismos de control para prevenir futuros casos similares y restaurar la confianza en el sistema.