El Servicio Mejor Niñez deberá pagar una indemnización de $200 millones por daño moral. El fallo, inédito en la Corporación de Asistencia Judicial (CAJ) de Valparaíso, se dio a conocer tras una demanda civil presentada por un adolescente que sufrió abuso sexual y violencia física en residencias del Sename y de Mejor Niñez. Este caso representa una reparación inédita en el sistema de protección infantil y ha generado gran impacto.
El proceso legal y la demanda presentada
La demanda fue presentada por un profesional en el marco del programa «Mi Abogado», que brinda defensa jurídica a niños, niñas y adolescentes (NNA) y está a cargo de la CAJ de Valparaíso, dependiente del Ministerio de Justicia. En la demanda, se relata que el adolescente estuvo más de 10 años en hogares del Sename y de Mejor Niñez, donde sufrió abuso sexual y violencia física.
El Tercer Juzgado de Letras de Copiapó acogió la demanda debido a la actuación deficiente del servicio, que no cumplió con su obligación de fiscalización y permitió que el menor sufriera vulneraciones en sus derechos. Mejor Niñez ha apelado al fallo y continuará con los actos procesales del caso.
Los años de sufrimiento del adolescente en residencias
El adolescente permaneció desde los 4 años hasta la mayoría de edad en hogares de la red de protección infantil. Pasó diez años en la residencia Alma en Vallenar, hogar que fue traspasado a la municipalidad debido a denuncias y cuestionamientos. Durante todo ese tiempo, sufrió abuso sexual, violencia física y diferentes vulneraciones de sus derechos.
Desde el interior de la Corporación de Asistencia Judicial de Valparaíso, se explica que se trata de una demanda de carácter civil que busca indemnizar el daño moral sufrido por el adolescente. Se plantean más de 60 causas de protección que tuvo el joven durante su estadía en el Sename y Mejor Niñez, desde 2008 hasta 2022.
Prácticas sexualizadas y violencia física en las residencias
Desde 2008, el menor tuvo contacto con residencias del Sename. Durante su paso por la protección, vivió en diferentes hogares y sufrió abusos y violencia. A los 7 años, comenzó a consumir drogas y estupefacientes, según un informe del Sename datado en 2017. Además, a los 13 años, estuvo involucrado en un homicidio y vivió en constante riesgo.
En la demanda se mencionan situaciones de prácticas sexualizadas y violencia física en las residencias. Los funcionarios encargados de su cuidado no aplicaron estrategias adecuadas de protección y contención. Además, se destaca que no se buscaron alternativas de cuidado personal en su familia y se realizaron internaciones inadecuadas en hogares.
Una reparación inédita en el sistema de protección infantil
A los 17 años, un tribunal de familia accedió a que el menor abandonara la residencia y viviera con su madre. Desde la CAJ de Valparaíso, se destaca que este caso representa una reparación inédita en el sistema de protección infantil. El programa Mi Abogado tiene la facultad de demandar al mismo Estado en defensa de los derechos de los niños y adolescentes.
El fallo ha generado gran impacto, siendo considerado como un hecho sin precedentes en la lucha por la protección de los derechos de los niños y niñas en situaciones de vulnerabilidad en Chile.