Sigue la preocupación en Japón ante la posibilidad de que ocurra un “megaterremoto“, luego de que las autoridades decretaran una alerta en respuesta a un fuerte sismo de magnitud 7,1 registrado el pasado 8 de agosto. Aunque no es posible predecir un sismo ni su magnitud, la alerta se determinó ya que en Japón tienen un sistema de sensores submarinos que permite efectuar un análisis de datos al movimiento de las placas tectónicas, y este arrojó la probabilidad de otro fuerte temblor.
Preocupación en Chile
Las advertencias sobre el posible “megaterremoto” fueron escuchadas en Chile, y se ha estimado que si se produce este evento vendría acompañado de un tsunami, cuyas olas podrían arribar hasta la costa del Pacífico. La semana pasada, el subsecretario del Interior, Manuel Monsalve, hizo un llamado a la calma ante el eventual “megaterremoto” en Japón e informó que el tsunami que le seguiría tardaría varias horas en llegar al país.
Opinión de los expertos
Miguel Marten, del Centro de Procesamiento y Análisis Geodésico USC de la Universidad de Santiago, sostuvo que “en niveles más prácticos, si es que ocurre el evento en Japón, sabemos que están prácticamente frente a nosotros». «Si lo miramos desde el punto de vista de las costas, la costa chilena y la costa de Japón, obviamente llegaría. Como ha dicho el SHOA, en un orden de 20 horas llegaría un remanente del tsunami, si es que llega a ocurrir un evento de esas magnitudes”, detalló. El experto aseveró que estas olas arribarían primero a Rapa Nui: “Abrazarían estas islas, no encontrarían un impedimento de atravesarlas». «Probablemente, no sea de las magnitudes que ocurriría en los lugares más cercanos al evento, sino que sería muy disminuido porque a medida que transcurre la distancia iría perdiendo energía, altura y velocidad», señaló.
Preparación de la Armada
Por su parte, el comandante Nicolás Guzmán, subdirector del Servicio Hidrográfico y Oceanográfico de la Armada (SHOA), aseguró que “la verdad estamos bastante preparados hace mucho tiempo con la gente y la tecnología adecuada para detectar un tsunami fuera y dentro de las costas de Chile». «Para eso contamos con una red de monitoreo bastante completa que consta de boyas y estaciones de nivel del mar repartidas en toda la costa de chile, incluido el territorio antártico e insular”, zanjó.