La noche del miércoles marcó un punto de inflexión para Manuel Monsalve, exsubsecretario implicado en graves delitos, quien fue trasladado a la cárcel de Rancagua tras la corroboración judicial de las acusaciones en su contra.
Confirmación y traslado a prisión
Tras una audiencia en el 7° Juzgado de Garantía de Santiago, el juez Mario Cayul confirmó los delitos de violación y abuso cometidos por Monsalve, ordenando su inmediato traslado. La resolución emitida estableció que el exsubsecretario cumpliera prisión preventiva en una cárcel pública, decision que culminó con su ingreso al centro penitenciario de Rancagua.
El traslado, ejecutado en estricta confidencialidad bajo la custodia de Gendarmería, se realizó pasada la medianoche, situando a Monsalve directamente en el módulo 86 del recinto, un área que reporta baja peligrosidad pero que agrupa a distintas figuras públicas también en conflicto con la ley.
Condiciones y seguridad en la cárcel
La cárcel de Rancagua, escogida para albergar a Monsalve, ha sido objeto de severas críticas por parte del personal de Gendarmería, quienes denuncian insuficiencias en la seguridad y falta de personal. “No tenemos el personal para estarlo cuidando en trato directo,” indicó César Guzmán, suboficial mayor de gendarmería.
Las condiciones actuales de la cárcel representan un desafío tanto para la integridad de los internos como para la seguridad del personal encargado, poniendo en tela de juicio la efectividad de las medidas de resguardo implementadas para casos de alto perfil como el de Monsalve.
Implicaciones y tiempo de reclusión
Manuel Monsalve, ahora enfrentando la realidad de la reclusión, deberá permanecer en prisión preventiva durante un mínimo de cuatro meses, periodo estipulado por el juzgado para la investigación dirigida por los fiscales Xavier Armendáriz y Francisco Jacir. Esta situación podría variar en caso de que la Corte de Apelaciones decida revocar la medida cautelar impuesta.
Monsalve comparte la celda número 44 con un excabo de Carabineros, Franchescole Sepúlveda, también procesado por delitos de cohecho y robo con intimidación. Esta circunstancia añade una capa adicional de complejidad al entorno penitenciario de Monsalve, considerando su anterior posición como máxima autoridad en seguridad del país.
El caso de Franchescole Sepúlveda Navarrete
Franchescole Sepúlveda, que comparte celda con Monsalve, es un excabo de Carabineros que estuvo involucrado en actos de corrupción durante patrullajes en María Elena, aprovechando las actividades delictivas locales para beneficio personal. Su modus operandi incluía distraer a contrabandistas para apoderarse de mercancías, principalmente cigarrillos, que luego eran revendidos.
Sepúlveda junto con sus compañeros fueron detenidos en enero de 2019, durante una operación donde optaron por disparos injustificados para ahuyentar a contrabandistas y apoderarse de cargamentos ilegales, situación que finalmente los llevó a enfrentar cargos y la prisión preventiva.