El incidente, que se produjo en la cárcel de Ovalle, involucró a siete internos y un funcionario de Gendarmería, quienes sufrieron diversas lesiones debido a un incendio repentino. Las autoridades informaron que el siniestro se originó dentro de una de las celdas del recinto penal durante la noche, creando una situación de emergencia que requirió la rápida intervención de los servicios de rescate.
De acuerdo con los reportes médicos iniciales, seis de los reos afectados fueron tratados por inhalación de humo y uno más presentó quemaduras leves. El miembro de Gendarmería también recibió atención médica por inhalación de humo, destacando el riesgo que este tipo de incidentes representa para todos los presentes en la instalación.
Respuesta a la Emergencia
La Dirección Regional de Gendarmería de Coquimbo se movilizó rápidamente para controlar el fuego, que había comenzado en el Pabellón 3. Afortunadamente, la acción conjunta de Bomberos y voluntarios permitió sofocar las llamas en pocos minutos, evitando así una tragedia mayor.
El coronel Rafael Cadenas Parra, Director Regional de Gendarmería, explicó: «Para la tranquilidad de la comunidad se comunica que gracias a la rápida y profesional acción de nuestros funcionarios se pudo controlar rápidamente el incidente». Su declaración apunta a la importancia de la preparación y respuesta inmediata en situaciones críticas dentro de los recintos penitenciarios.
Investigación en Curso
Tras el incidente, se presentó una denuncia al Ministerio Público. El objetivo es esclarecer las causas del incendio y determinar si hay responsabilidades a atribuir en su origen. Este componente es esencial para garantizar que se tomen las medidas adecuadas y prevenir futuros incidentes.
Las autoridades continúan con la investigación para comprender completamente los detalles y circunstancias del incendio, asegurando así la seguridad de todos los internos y el personal del recinto en el futuro.