Adoptar nuevos hábitos y abandonar los malos hábitos puede ser un desafío, pero James Clear comparte algunas estrategias efectivas para hacerlo más fácil.
Los disparadores para la creación de hábitos
Según Clear, los disparadores son claves para asimilar los nuevos hábitos y automatizar su ejecución.
El tiempo es uno de los disparadores más efectivos. Establecer una rutina horaria ayuda a consolidar un hábito.
- Crear una cita ineludible con el nuevo hábito.
- Asociar el hábito a un momento específico del día.
- Eliminar malos hábitos al cambiar el momento en que se realizan.
La ubicación también puede ser un disparador poderoso. Ajustar el entorno para apoyar el hábito deseado aumenta las probabilidades de éxito.
- Retirar objetos que fomenten malos hábitos.
- Tener a la vista objetos que fomenten hábitos saludables.
El “habit stacking” es otra estrategia efectiva. Consiste en vincular una nueva acción a un hábito existente para fortalecer las conexiones entre ambos.
- Asociar una nueva acción a un hábito ya establecido.
- Utilizar la inercia del hábito existente para adquirir uno nuevo.
Las emociones también pueden ser disparadores para los hábitos. Aprender a gestionar las emociones y asociarlas a hábitos positivos es fundamental.
- Ser consciente de las emociones al experimentarlas.
- Vincular emociones a hábitos saludables.
El entorno social también es un factor importante. Rodearse de personas que tienen hábitos deseables aumenta las posibilidades de éxito.
- Buscar apoyo y motivación en personas que ya tienen los hábitos deseados.
- Evitar ser influenciado por personas con malos hábitos.