El Consejo Fiscal Autónomo (CFA) analiza el impacto fiscal del Crédito con Aval del Estado (CAE) y hace recomendaciones sobre los registros contables del crédito. El CFA destaca la importancia de tener una contabilidad precisa para poder compararla con el nuevo instrumento propuesto por el Gobierno. El crédito tiene efectos fiscales tanto en el respaldo del Estado como en las transacciones que afectan los activos y pasivos fiscales. Además, se detectaron problemas en los registros contables, lo que distorsiona la contabilidad de los ingresos y gastos. El CFA recomienda corregir estos registros y evaluar medidas de prudencia fiscal.
Análisis del impacto fiscal del CAE
El Consejo Fiscal Autónomo (CFA) ha examinado detenidamente el impacto fiscal del Crédito con Aval del Estado (CAE) y ha identificado una serie de problemas con los registros contables relacionados con este instrumento de financiamiento. El CFA destaca la importancia de tener registros precisos y confiables para poder compararlos con el nuevo instrumento propuesto por el Gobierno en un proyecto de ley.
“La adecuada contabilidad de los efectos fiscales del CAE es necesaria para poder compararlos con los del nuevo instrumento de financiamiento público para estudios de nivel superior”, señaló el CFA.
Consejo Fiscal Autónomo
El CAE tiene efectos fiscales tanto en el respaldo del Estado como en las transacciones que afectan los activos y pasivos fiscales, así como el patrimonio neto. El CFA señala que el Estado participa como garante de los créditos concedidos por los bancos y lleva a cabo varias transacciones que afectan estos registros.
- Entre 2019 y 2023, el Estado compró el CAE por un promedio de 13,5 millones de UF al año, equivalente a US$2.666 millones en total.
- Se desembolsaron unos US$946 millones en activación de garantías y beneficios para deudores.
- El monto total garantizado de créditos alcanzó los US$1.235,4 millones.
El CFA también identificó una serie de problemas en los registros contables relacionados con el CAE. Por ejemplo, el pago realizado por los deudores se registra como «ingresos» en lugar de como una devolución de crédito. Además, hay egresos que disminuyen el patrimonio neto del Estado pero no se registran como gastos, como el sobreprecio que paga el Estado al comprar créditos a los bancos. Esto genera un sesgo al alza en los ingresos fiscales y a la baja en los gastos registrados.
“La contabilidad que históricamente se ha realizado del CAE genera un sesgo al alza en el registro de los ingresos fiscales, y a la baja en los gastos”, concluyó el CFA.
Consejo Fiscal Autónomo
Ante estos hallazgos, el CFA ha recomendado a la Dirección de Presupuestos (Dipres) que corrija los registros contables del CAE en coordinación con la Tesorería y Contraloría General de la República. Esto permitirá mostrar de manera más precisa el uso de los recursos y la situación financiera y patrimonial del Estado.
Otras alertas identificadas por el CFA
El Consejo Fiscal Autónomo también ha llamado la atención sobre otros aspectos relacionados con el CAE. Por ejemplo, ha detectado un aumento en los créditos con garantía ejecutada y en posesión del Estado, así como en los créditos de los bancos. Esto podría indicar que hay un monto significativo que no se ha registrado históricamente como gasto asociado al CAE.
Finalmente, el CFA ha sugerido a la Dipres que evalúe medidas de prudencia fiscal para hacer frente a los riesgos de incobrabilidad del CAE. Además, recomienda aumentar la disponibilidad de información sobre los efectos fiscales del CAE y realizar un monitoreo constante de los riesgos que representa este instrumento para las finanzas del Estado. Asimismo, insta a explicar los criterios utilizados para clasificar como gasto o inversión las transacciones relacionadas con el CAE.
