Tragedia en Montenegro: un hombre armado y borracho asesinó a 12 personas, incluyendo dos niños, y luego se suicidó.
Detalles del Incidente
El trágico suceso se desarrolló el miércoles en el sur de Montenegro, instaurando un ambiente de shock y luto en la nación balcánica. Según informó Andrijana Nastic, fiscal del caso, el agresor asesinó a un total de doce personas.
La policía indicó inicialmente que todas las víctimas habían muerto en un restaurante local, sin embargo, más tarde se confirmó que los fatales encuentros ocurrieron en varios puntos alrededor de un pueblo cercano a la ciudad de Cetiña. Tras el asalto, el perpetrador, identificado como A. M., de 45 años, se dio a la fuga.
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Confrontación y desenlace fatal
Después de un seguimiento intensivo, la policía logró ubicar al sospechoso. A pesar de los esfuerzos por hacerlo rendir y entregar su arma, el hombre optó por quitarse la vida. «Se disparó una bala en la cabeza», explicó Lazar Scepanovic, jefe de policía. Aunque se intentó trasladarlo a un centro hospitalario, el agresor sucumbió a las heridas.
Causa del tiroteo
Los eventos que llevaron a este trágico desenlace comenzaron el mismo miércoles por la tarde. Según Scepanovic, todo empezó cuando el agresor, después de pasar gran parte del día bebiendo y tras tener una disputa con otro cliente, decidió ir a su casa, tomar una pistola y llevar a cabo la masacre.
El ataque no se limitó a un solo lugar; el agresor se desplazó a tres sitios diferentes, asesinando entre otros a miembros de la familia Martinovic, a un pariente propio, y a dos niños de 10 y 13 años. Además, intentó asesinar a otras cuatro personas, quienes afortunadamente sobrevivieron y están fuera de peligro.
Reacción del Gobierno
En respuesta a la magnitud de la tragedia, el gobierno de Montenegro ha decretado tres días de luto oficial. Este período busca honrar la memoria de las víctimas y unir al país en su dolor por las irreparables pérdidas humanas.
Estos eventos han resaltado la urgencia de abordar cuestiones relacionadas con la seguridad y el control de armas en la región, con la esperanza de prevenir futuras tragedias de esta naturaleza.
