Presidenta de México amenaza con demandar a Google por cambio de nombre del Golfo de México en sus mapas.
Conflicto diplomático por el cambio de nombre del Golfo
Este jueves, la presidenta de México, Claudia Sheinbaum, ha anunciado la posibilidad de emprender acciones legales contra Google. La controversia surge debido a que la empresa tecnológica ha cambiado el nombre del Golfo de México en sus plataformas, denominándolo «Golfo de América» siguiendo un decreto estadounidense.
Detalles del decreto de Trump y la respuesta de México
Sheinbaum aclaró que el decreto emitido por el presidente de EE. UU., Donald Trump, aplica únicamente a la sección de la plataforma continental que le pertenece a Estados Unidos. La mandataria mexicana sostiene que el decreto no tiene jurisdicción sobre la totalidad del Golfo, que es compartido por varios países.
- La confusión se debe a una interpretación errónea del alcance del decreto.
- México ha enviado explicaciones formales a Google mediante la cancillería.
La reacción de Google ha sido de mantener su posición, lo que ha causado consternación en el gobierno mexicano. Sheinbaum indicó que están considerando seriamente la vía legal para resolver este conflicto.
Reacción de otros gigantes tecnológicos
La empresa Apple ha seguido un camino similar al de Google, adaptando el nombre del Golfo en sus mapas para los usuarios en Estados Unidos. Esto pone de manifiesto la influencia de las normativas estadounidenses en las operaciones de las empresas tecnológicas globales.
En respuesta a las acciones de Trump y la adopción de los cambios por parte de Google y Apple, Sheinbaum respondió de forma irónica sugiriendo que se debería renombrar a Estados Unidos como «América Mexicana», haciendo una referencia histórica a los mapas del siglo XVII.
Impacto en la diplomacia y la cartografía digital
Este incidente no solo plantea cuestiones legales y diplomáticas, sino que también destaca la importancia del mapeo digital en la geopolítica contemporánea. Las decisiones de empresas como Google y Apple tienen un peso considerable en cómo se perciben las fronteras y los nombres geográficos en el ámbito global.
La disputa actual entre el gobierno mexicano y Google subraya la tensión entre la soberanía nacional y las políticas corporativas internacionales, un tema que probablemente continúe siendo relevante en la era digital.