La Corte de Apelaciones de Chillán decretó la prisión preventiva para un hombre acusado de secuestrar y agredir a su cónyuge en la región de Ñuble.
Según las investigaciones realizadas por la Fiscalía Regional de Ñuble, el hombre mantuvo encerrada a su esposa en su propia casa por más de cuatro horas, impidiéndole salir y causándole lesiones. Además, se comprobó que durante el ataque, el acusado provocó destrozos en el inmueble.
El abogado asesor de la Fiscalía, Rodrigo Flores Luna, explicó que la Corte determinó que los hechos estaban debidamente comprobados y que era necesario tomar la medida cautelar de prisión preventiva para proteger a la víctima y asegurar una investigación adecuada.
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La acusación incluye los delitos de secuestro, lesiones menos graves y daños en contexto de violencia intrafamiliar. Estos hechos reflejan la importancia de abordar de manera efectiva la violencia de género y garantizar la seguridad de las víctimas.
Es fundamental que las autoridades y la sociedad en su conjunto continúen trabajando en la prevención de la violencia doméstica y en la protección de las personas que se encuentran en situaciones de riesgo. La violencia contra las mujeres es un problema grave que requiere una respuesta decidida y coordinada de todos los actores involucrados.
La decisión de la Corte de Apelaciones de Chillán envía un mensaje claro de que este tipo de comportamiento no será tolerado y que se tomarán medidas firmes para proteger a las víctimas y garantizar su seguridad. Es necesario que este caso sea tomado como un ejemplo y que se implementen políticas y medidas efectivas para prevenir y erradicar la violencia de género en todas sus formas.
La violencia intrafamiliar es un problema social complejo que requiere una respuesta integral, que incluya tanto la persecución y sanción de los agresores como la protección y apoyo a las víctimas. Solo a través de un esfuerzo conjunto podremos construir una sociedad más justa y libre de violencia.
