Bugatti: Mirando a los 500 km/h con tecnología Michelin

Bugatti redefine ambiciones en velocidad mientras encamina su enfoque hacia el rompimiento del récord de los 500 km/h.

Por Sergio Mendoza 1 Vista
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Durante la última década, Bugatti, junto a Koenigsegg y Hennessey, han liderado la carrera por establecer nuevos límites en la velocidad automotriz, destacándose en pruebas como la velocidad máxima y el desafío 0-400-0. A pesar de anunciar su retiro de esta competencia en 2019, la firma no ha claudicado en su búsqueda por la excelencia y la innovación.

La mira en los 500 km/h: Un nuevo objetivo para Bugatti

Recientemente, bajo la nueva dirección de Mate Rimac a través de la alianza Bugatti-Rimac, la compañía ha reavivado su interés en la conquista de récords de velocidad, en especial, la ansiada barrera de los 500 km/h. Rimac, conocido por su enfoque hacia la innovación en vehículos eléctricos, ha traído un nuevo aire al equipo de Bugatti, marcando un antes y un después en la historia de la marca.

“Esa fue exactamente nuestra discusión. ¿Puedes hacer esto? ¿Dónde está el límite?”, comentó Rimac durante una entrevista con Top Gear.

Mate Rimac

Desafíos tecnológicos y colaboración con Michelin

La búsqueda de la velocidad sin precedentes no viene sola. Colaboraciones con empresas especializadas, como Michelin, son cruciales. Los neumáticos juegan un papel fundamental al enfrentar las extremas demandas de velocidad, donde un pequeño fallo puede tener consecuencias desastrosas. Michelin ha sido clave, desarrollando neumáticos que han resistido pruebas sobre máquinas utilizadas incluso para las gomas del Transbordador Espacial, alcanzando velocidades de hasta 510 km/h.

  • Aumento extremo de la temperatura interna del neumático.
  • Potenciales deformaciones extremas bajo alta velocidad.
  • Incremento de la presión interna y riesgos de reventón.

Con un enfoque renovado y tecnología de vanguardia, Bugatti no solo parece listo para desafiar una vez más los límites de la velocidad automotriz, sino también para posiblemente establecer un nuevo estándar en la industria del motor. La pelota ahora está en el tejado de Michelin para equilibrar la audacia con la seguridad, mientras el mundo espera ansiosamente que Bugatti haga historia una vez más.

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