Al menos 184 personas han muerto en Puerto Príncipe por orden de un jefe pandillero en represalia por la muerte de su hijo.
Terror en Puerto Príncipe: Una Venganza Mortal
Este fin de semana, la capital de Haití se vio envuelta en una ola de violencia desatada por el jefe pandillero Monel Féliz, conocido como ‘Mikano’. La tragedia, que dejó un saldo de 184 muertos, ocurrió en el contexto de un nuevo estado de emergencia y frente a un contingente policial internacional que hasta la fecha ha sido ineficaz.
Detalles del Macabro Evento
Según informó el Alto Comisionado para los Derechos Humanos de Naciones Unidas, Volker Turk, las víctimas fueron seleccionadas y ejecutadas por la banda de Mikano en Cité Soleil, uno de los barrios más peligrosos y empobrecidos de la ciudad. La mayoría de las víctimas, mayores de 60 años, eran practicantes del vudú, un elemento esencial en la cultura local.
Perfil del Jefe Pandillero
Monel Féliz lidera Viv Ansanm, una coalición de pandillas surgida con el objetivo de derrocar el frágil gobierno de Haití. La ira de Féliz se desató tras la muerte de su hijo, por la que culpó a los ancianos de Wharf Jeremie, quienes, según un sacerdote vudú consultado por él, habían maldecido a su familia.
“Este acto de brutalidad indiscriminada es un llamado de atención sobre la urgencia de restaurar la ley y el orden en Haití”, declaró Turk.
Volker Turk, Alto Comisionado para los Derechos Humanos de Naciones Unidas
Reacciones y Consecuencias
La comunidad internacional ha expresado su conmoción y tristeza ante los eventos. Mientras tanto, las autoridades haitianas y los cuerpos de seguridad internacionales buscan estrategias para contrarrestar la influencia de las pandillas y evitar más derramamiento de sangre.
- Exigencia de una respuesta más efectiva por parte de las fuerzas del orden.
- Necesidad de apoyo internacional para reforzar la seguridad en Haití.
- Impacto psicológico y social duradero sobre las comunidades afectadas.
Este nuevo capítulo de violencia subraya la grave crisis humanitaria y de seguridad que enfrenta Haití, un país marcado por la inestabilidad política y el azote constante de la violencia pandillera.