La funcionaria cuestionada de la Corporación Cultural de Ñuñoa regresa al municipio después del cambio en la administración.
El regreso polémico de una funcionaria a la corporación
Verónica Farfán, quien recibió una millonaria indemnización, volvió al municipio un mes después de la asunción de Sebastián Sichel.
Según la Transparencia Activa de la corporación, Farfán tenía un contrato indefinido a partir del 9 de diciembre de 2024.
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Sin embargo, fuentes del municipio de Ñuñoa afirman que Farfán fue contratada el 10 de enero de 2025.
La historia de Farfán y su regreso al municipio se remonta a una solicitud de la exalcaldesa Emilia Ríos.
El pacto con el exalcalde Andrés Zarhi
Farfán y otros directivos acordaron sus finiquitos con Zarhi, reservándose el derecho de demandar por despido injustificado.
En el finiquito indebido se incluyeron indemnizaciones sustitutivas y por años de servicio, lo que resultó en un pago excesivo.
Farfán fue finiquitada el 9 de julio de 2021 y recibió más de $26 millones por ocho años de servicio.
Posteriormente, presentó una demanda laboral contra el municipio que resultó en un pago total cercano a los $92 millones.
Respuesta del municipio de Ñuñoa
Ante esta situación, el municipio de Ñuñoa aclaró que las indemnizaciones por despido se ajustan a la legalidad.
