El ministro del Interior, Álvaro Elizalde, se refirió a la acusación de tráfico de influencias en contra de la diputada Karol Cariola, presidenta de la Cámara. La acusación se enmarca en el caso Sierra Bella, que involucra la venta de una ex clínica en Santiago. Según un informe de la PDI, se encontraron conversaciones entre Cariola e Irací Hassler, entonces alcaldesa, que apuntarían al delito de tráfico de influencias. Se allanó el domicilio de Cariola y se incautaron un notebook y un teléfono celular. Elizalde enfatizó en que la investigación está en curso y que no se deben anticipar conclusiones.
El caso Sierra Bella y el presunto tráfico de influencias
El caso Sierra Bella surgió a partir de indagatorias sobre la venta de una ex clínica en Santiago, que estaba planeada para ser comprada por el municipio. En este contexto, se encontraron conversaciones entre la diputada Cariola y la entonces alcaldesa Hassler. Durante estas conversaciones, Cariola propuso la idea de crear una clínica comunal y Hassler mencionó la posible compra de dos inmuebles: uno ubicado en Carmen 35 y otro en Sierra Bella.
La causa del allanamiento e incautación de los dispositivos electrónicos de Cariola se debe a que, según fuentes cercanas, en las conversaciones entre ambas autoridades habría mensajes que constituirían el delito de tráfico de influencias. Específicamente, se menciona una solicitud de favores a Hassler en relación con la obtención de patentes municipales para un empresario chino, amigo de la diputada.
Declaraciones del ministro del Interior
Respecto a este caso, el ministro del Interior, Álvaro Elizalde, mencionó que es una investigación en curso y que hay que permitir que se lleve adelante con la celeridad necesaria. El Gobierno no lleva a cabo estas investigaciones, sino que son responsabilidad del Ministerio Público. Elizalde recalcó que no se deben anticipar conclusiones y que las conclusiones finales serán dadas a conocer por los órganos correspondientes una vez que la investigación termine.
En cuanto a la diputada Cariola, Elizalde señaló que ella es la cabeza de una de las ramas de otro poder del Estado y que, por lo tanto, no corresponde al Gobierno pedir explicaciones. La investigación está en manos del Ministerio Público y se espera que se desarrollen de acuerdo a los procedimientos establecidos.